El término estrategia de costo cero se refiere a una decisión comercial que no implica ningún gasto de ejecución. Una estrategia así no le cuesta nada a una empresa o individuo mientras mejora las operaciones, hace que los procesos sean más eficientes o sirve para reducir los gastos futuros. Como práctica, se puede aplicar una estrategia de costo cero en varios contextos para mejorar el rendimiento de un activo.
Cómo funciona una estrategia de costo cero
Emplear una estrategia de costo cero significa que no hay gastos adicionales para realizar mejoras o adiciones a las actividades de una empresa u otra entidad. Como se mencionó anteriormente, una persona o empresa puede reducir los gastos futuros, así como simplificar y racionalizar sus procesos actuales mediante el uso de estrategias de costo cero.
Las estrategias comerciales de costo cero se pueden usar con una variedad de activos y tipos de inversión. Incluidas acciones, productos básicos y opciones. Las estrategias de costo cero también pueden involucrar la compra y venta simultánea de un activo con costos similares que se cancelan entre sí.
Así mismo, las estrategias de negociación de costo cero también implican simultáneamente la compra y venta de un activo con costos similares que se cancelan entre sí.
Ejemplos de estrategias comerciales de costo cero
Una compañía que busca aumentar su eficiencia al tiempo que reduce los costos puede decidir comprar un nuevo servidor de red para reemplazar varios más antiguos.
Debido a los avances tecnológicos, los servidores más antiguos se revenden y la suma obtenida de la venta paga por el nuevo servidor. Que es más eficiente, funciona más rápido y reduce los costos en el futuro debido a menores costos de mantenimiento y energía.
Una aplicación práctica de una estrategia cero para un individuo puede ser mejorar las perspectivas de ventas de una casa al despejar todas las habitaciones. Además de empacar el exceso de pertenencias en cajas y trasladar las cajas al garaje. Como la mano de obra es gratuita, no se incurre en ningún costo.
Estrategias de costo cero en el comercio de opciones
Un ejemplo de una estrategia comercial de costo cero es el cilindro de costo cero. En esta estrategia de negociación de opciones, el inversor trabaja con dos opciones fuera del dinero. Ya sea comprando una llamada y vendiendo una opción de venta, o comprando una opción de venta y vendiendo una opción de compra.
El precio de ejercicio y al que se puede comprar o vender el contrato, se elige de modo que las primas de la compra y venta se cancelen mutuamente. Las estrategias de costo cero ayudan a reducir el riesgo al eliminar los costos iniciales.
Otro ejemplo de una estrategia cero implica establecer varias operaciones de opciones simultáneamente. Para las cuales las primas de las operaciones de crédito neto compensan las primas de comercio de débito neto. Con tal estrategia, las ganancias están determinadas por el desempeño de los activos en lugar de los costos de transacción.
