Un vistazo a los puntajes corporativos de ‘Riesgo ambiental, social y de gobernanza’ podría sugerir que las empresas de alimentos a base de plantas son menos sostenibles que las marcas convencionales. Esto es lo que realmente sucede detrás de los números.
A principios de este mes, The New York Times publicó un artículo en el que afirmaba que las empresas cárnicas de origen vegetal como Beyond Meat están obteniendo calificaciones de sostenibilidad bastante terribles de empresas como Sustainalytics, que clasifican a todo tipo de empresas públicas. Algunas de las calificaciones de ESG, informaron, eran incluso tan malas como las de sus homólogos carnívoros como Tyson Foods y JBS.
Y, sin embargo, todo lo que sabemos sobre la carne de res dice que es un factor importante que contribuye a la degradación ambiental en todo el mundo y es mucho peor que la mayoría de los productos alimenticios vegetarianos. Entonces, ¿qué está pasando realmente aquí? ¿Es falso todo lo que pensamos sobre la sostenibilidad de una dieta a base de plantas? No exactamente.
¿Qué son las calificaciones ESG?
Es importante comprender quiénes son las empresas de calificación y qué deben hacer estas calificaciones. De la misma manera que las calificaciones crediticias de las empresas intentan capturar los riesgos crediticios, estos otros valores, llamados calificaciones ESG, intentan capturar todos los riesgos para la corporación y sus inversores que no se encuentran en un balance. Observan los factores ambientales, sociales y de gobierno que podrían llevar a una empresa a problemas financieros. Eso significa observar el impacto ambiental de una empresa, pero también otras cosas, como la cultura de la empresa, las prácticas de contratación, las controversias y las interacciones con los gobiernos.
Por ejemplo, Tesla, dice Florian Berg , investigador asociado de la MIT Sloan School of Management que se centra en la inversión sostenible. Tesla fabrica un producto mucho más ecológico que sus pares en la industria automotriz, pero a menudo los analistas lo critican por su mala cultura empresarial y su alta rotación.
“Si su producto genera un gran impacto en el mundo, como supuestamente ocurre con Tesla, no significa que tenga una buena calificación ESG”, señala Berg.
Y la propia investigación de Berg ha encontrado que las calificaciones de diferentes empresas, aunque están correlacionadas, pueden ser realmente diferentes en ocasiones. Gran parte de eso puede atribuirse a diferentes metodologías y lo que las diferentes empresas dicen que valoran.
Entonces, la posible alarma que se genera sobre Beyond Meat y otras marcas no proviene exactamente de los defensores del medio ambiente, sino más bien de las empresas envueltas en el mercado financiero mundial. Y miran mucho más que las emisiones y el uso de la tierra.
¿Con qué precisión reflejan las calificaciones ESG la sostenibilidad?
Si bien una calificación ESG puede ser un indicador bastante bueno de sostenibilidad, según Berg, no son un análogo perfecto para los impactos ambientales del mundo real.
“Podría suceder potencialmente que usted cree una cartera utilizando calificaciones ESG”, dice, “y la cartera que consideran ‘sostenible’ emite más emisiones de CO2 por dólar invertido que si hubiera invertido solo en el S&P 500”.
Beyond Meat, por ejemplo, tiene una calificación de “grave” de Sustainalytics. Por el contrario, Ford Motors, Exxon Mobil, Royal Dutch Shell, BP y DuPont Chemicals tienen mejores calificaciones. Wells Fargo, que cayó en problemas por crear millones de cuentas bancarias fraudulentas para clientes sin su consentimiento, también tiene una mejor calificación de Sustainalytics. La compañía eléctrica PG&E, responsable de múltiples incendios forestales devastadores en California, recibió la etiqueta de “severo”, pero incluso tiene un puntaje general mejor que Beyond Meat.
También lee: Beyond Investing lanzará un ETF sobre el clima vegano
