Un fondo de cobertura es una inversión alternativa que utiliza fondos agrupados que emplean diferentes estrategias para obtener un rendimiento activo, o alfa, para sus inversores.
Los fondos de cobertura pueden administrarse agresivamente o hacer uso de derivados y apalancamiento en los mercados nacionales e internacionales. Con el objetivo de generar altos rendimientos (ya sea en sentido absoluto o sobre un punto de referencia de mercado específico).
Es importante tener en cuenta que los fondos de cobertura generalmente solo son accesibles para los inversores acreditados. Ya que requieren menos regulaciones de la SEC que otros fondos. Un aspecto que ha diferenciado a la industria de los fondos de cobertura es el hecho de que enfrentan menos regulación que los fondos de inversión y otros vehículos de inversión.
Ahondando sobre lo que es un fondo de cobertura
Cada fondo de cobertura se construye para aprovechar ciertas oportunidades de mercado identificables. Los fondos de cobertura utilizan diferentes estrategias de inversión y, por lo tanto, a menudo se clasifican según el estilo de inversión.
Legalmente, los fondos de cobertura a menudo se establecen como sociedades limitadas de inversión privada. Mismas que están abiertas a un número limitado de inversores acreditados y requieren una gran inversión mínima inicial.
Las inversiones en fondos de cobertura no son líquidas. Ya que a menudo requieren que los inversores mantengan su dinero en el fondo durante al menos un año. Un tiempo conocido como el período de bloqueo. Los retiros también pueden ocurrir solo en ciertos intervalos, como trimestralmente o semestralmente.
Características clave de un fondo de cobertura
Son más caros en comparación con los instrumentos de inversión convencionales porque tienen una estructura de tarifas de dos y veinte. Lo que significa que cobran el 2% por la gestión de activos y toman el 20% de las ganancias generales como tarifas.
Solo están abiertos a inversores acreditados o calificados. Individuos con un ingreso anual que excede los $200,000 dólares durante los últimos dos años o un patrimonio neto que excede el millón.
Como tal, la Comisión de Bolsa y Valores considera que los inversores calificados son lo suficientemente adecuados para manejar los riesgos potenciales que provienen de un mandato de inversión más amplio.
Ofrecen mayor libertad de inversión que otros fondos. El universo de inversión de un fondo de cobertura solo está limitado por su mandato. Básicamente puede invertir en cualquier cosa: tierra, bienes raíces, acciones, derivados y monedas. Los fondos de inversión, por el contrario, tienen que ceñirse básicamente a acciones o bonos y, por lo general, son de largo plazo.
Otra de sus características es que a menudo emplean apalancamiento. Los fondos de cobertura a menudo utilizarán dinero prestado para amplificar sus rendimientos. Como vimos durante la crisis financiera de 2008, el apalancamiento también puede eliminar los fondos de cobertura.
Hay características más específicas que definen un fondo de cobertura. Pero básicamente, debido a que son vehículos de inversión privada que solo permiten que personas adineradas inviertan, los fondos de cobertura pueden hacer lo que quieran siempre que divulguen la estrategia por adelantado a los inversores.
Riesgos latentes para este tipo de fondo
A continuación se presentan algunos de los riesgos de los fondos de cobertura:
- La estrategia de inversión concentrada expone a los fondos de cobertura a pérdidas potencialmente enormes.
- Los fondos de cobertura generalmente requieren que los inversores bloqueen el dinero por un período de años.
- El uso de apalancamiento, o dinero prestado, puede convertir lo que hubiera sido una pérdida menor en una pérdida significativa.
Cómo elegir un fondo de cobertura
Con tantos fondos de cobertura en el universo, es importante que los inversores sepan lo que están buscando. Para así agilizar el proceso de diligencia debida y tomar decisiones oportunas y apropiadas.
Al buscar un fondo de cobertura de alta calidad, es importante que un inversionista identifique las métricas que son importantes para ellos y los resultados requeridos para cada uno.
Estas pautas se pueden basar en valores absolutos, como los rendimientos que superan el 20% anual durante los cinco años anteriores. O pueden ser relativos, como los cinco fondos de mayor rendimiento en una categoría particular.
